▷ Napai | Restaurante en Majadahonda

Restaurante Napai | Restaurante en Majadahonda

Restaurante en Majadahonda, España

Dirección: Calle Manuel de Falla, 3, 28222 Majadahonda, Madrid, España

C4XQ+MF Majadahonda, España

Teléfono: +34 919 07 45 52

Calificación de : 4,2 187 Comentarios en Google

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187 Opiniones sobre Napai | Restaurante en Majadahonda:

Mario Perea4La comida estaba muy buena,el restaurante muy bonito decorado y el ambiente tranquilo y agradable. Cené en la terraza y estuve muy agusto en el sofá. Los camareros muy simpáticos y atentos pero un poco insistentes en retirar la comida. El cóctel muy rico pero era muy pequeño.Lo que deberían mejorar es poner más cantidad de comida en los platos. Relación calidad/precio correcta con el descuento de the fork,pero es un poco caro. Aún así recomiendo el restaurante al 100% y volvería a repetir!!!Luis Medina-Montoya Hellgren5La decoración y el ambiente logradisimo, el servicio de gran calidad. Nos atendió de forma excelente y rápida Leo.
La comida toda muy rica. Ticket en torno a 40€ persona sin tomar vino.
Volveremos.K Bollero3Me gusta hacer reseñas sobre restaurantes. Conocer sitios y ver modas y tendencias.
Tenía una idea rondándome la cabeza hace tiempo. Un año o así y después de pasar por aquí, he tenido, como se dice ahora, una epifanía.

En su web dicen que “Napai es un paraíso en Majadahonda donde puedes disfrutar de una experiencia gastronómica diferente con un puntito canalla”.
De esta frase yo quitaría dos palabras. Primero quitaría “gastronómica” porque aquí lo que hay en el plato tiene importancia relativa, pero dejaría “experiencia”, porque lo que te va a pasar aquí lo vas a recordar. ¿O es que tu has ido mucho a ligar a un restaurante?
No lleva ni un año abierto. Desde mayo 22. Para que te hagas una idea, en la fiesta de inauguración había un autobús, un Hummer y un Ferrari aparcados en la puerta acelerando sin parar. Un DJ dentro, jamón, croquetas y un montón de “gente guapa”.

También quitaría la palabra “canalla” que aplicada a una persona queda definida como “Que es despreciable por su comportamiento vil” y aplicada a experiencia no resulta apetecible. Menos para la “gente guapa”. Creo.

Fíjate que no digo nada sobre la palabra “paraíso”. Allá cada cual.

Así que aquí nos tienes yendo a comer un día entre semana para probar una carta que tiene como inspiración “las islas polinésicas más alejadas y exóticas”.

El local es magnífico. Tiene dos terrazas y un interior decorado profesionalmente con varias alturas. Aunque hay un púlpito que acoge la cabina del DJ, a esta hora no hay música estridente y si a ti te lo parece, el amable responsable está dispuesto a bajar el volumen en un magnífico detalle de sensibilidad y ganas de agradar que se mantiene durante todo el servicio.

Y no digo más. Me he dado cuenta de que esto no es un restaurante y no estoy capacitado para reseñarlo. Igual que no estoy capacitado para reseñar Casa Lucio, pongamos por caso, como sala de baile.

¿Comimos? Si ¿Bien? No ¿Mal? Tampoco ¿Barato? No ¿Caro? No.

Como metáfora, puedes consultar el largometraje español más visto de la década de los sesenta.
Y ya.